El uso de antibióticos provoca cambios en la microbiota intestinal, y esto está asociado con el desarrollo de diversas enfermedades como la diabetes o la obesidad. La exposición a la flora vaginal durante el parto se cree que incrementa la diversidad microbiana en los niños, lo que redunda en una mayor protección frente a esas futuras enfermedades.
Los antibióticos se pueden clasificar en «de amplio espectro» o «de espectro reducido», siendo los primeros capaces de actuar frente a una gama mayor de bacterias. Sin embargo, los efectos negativos de los antibióticos de alto espectro pueden ser mayor que los de espectro reducido, precisamente por su capacidad mayor para destruir al mismo tiempo bacterias beneficiosas que se encuentran en nuestro organismo.
Los autores se plantean en esta investigación si la utilización de antibióticos de amplio espectro en niños menores de 2 años está asociado al desarrollo de diabetes tipo 1 en la infancia (hasta los 14 años), considerando también el tipo de parto (cesárea frente a parto vaginal).
Metodología
Se emplearon 4 bases de datos de registros médicos y de nacimientos en Dinamarca desde 1997 hasta 2010, con lo que se tuvo acceso a la información sobre el tipo de parto y características del neonato, los antibióticos recetados y varias características de los padres (historial médico, edad, nivel educativo). Esos niños fueron seguidos hasta durante 14 años hasta que presentaran los siguientes eventos (diabetes tipo I, muerte, emigración, final de seguimiento), con lo que la base de datos total fue de 858201 niños (tras excluir aquellos que murieron, emigraron o eran diagnosticados con diabetes tipo 1 abes de los 2 años de edad).
Se empleó un análisis de supervivencia con un modelo proporcional de Cox ajustando por las diversas covariables para explicar el riesgo de padecer diabetes tipo 1. Se comprobó la hipótesis de proporcionalidad y se estimaron diferentes modelos con diversas interacciones.
Resultados e implicaciones
A nivel descriptivo, lo primero que llama la atención es una estabilidad en la prescripción de antibióticos a lo largo del periodo de análisis, es decir, no hay crecimiento, lo que es una buena noticia dado que el 50% de las veces que se prescriben son innecesarios. Sin embargo, se ve claramente que los antibióticos de amplio espectro han superado a los de espectro reducido en los últimos años.
El 71.8% de los niños estudiados tomó algún antibiótico antes de los 2 años. Esa probabilidad está asociada con el tipo de parto (mayor en los de cesárea), género (mayor en los niños), peso de niño al nacer, (mayor en los niños con peso menor de 2.5 kg), edad de los padres (mayor cuanto más jóvenes) y educación de los padres (mayor cuanto menor nivel educativo). Estas cifras dan una idea inicial e indirecta de la probabilidad de enfermar en esos niños pequeños en función de esas características.
Los análisis multivariantes tras aplicar el modelo de Cox indicaron que los niños que habían sido medicados con antibióticos de amplio espectro tenían un riesgo mayor de desarrollar diabetes tipo 1: (HR:1.13; 95% IC 1.02 a 1.25). Además, ese riesgo se incrementaba con la predisposición genética (padres diabéticos) y primiparidad (primer parto). Sin embargo, cuando se tenía en cuenta el tipo de parto en su interacción con el tipo de antibiótico tomado, entonces existía un efecto significativo de esa interacción; aquellos niños nacidos con cesárea intraparto (no planeada) o cesárea preparto tenían un riesgo mayor: (HR: 1.70; 95% CI 1.15 a 2.51) y (HR: 1.63; 95% CI 1.11 a 2.39), respectivamente.
De este modo, el tomar antibióticos de amplio espectro antes de cumplir los 2 años está asociado con un mayor riesgo de padecer diabetes tipo 1 en la infancia para niños nacidos de cesárea. La penicilina y los macrólidos son identificadas como medicamentos con riesgo especial.
Limitaciones/Comentarios
Una de las cuestiones a discutir es el hecho de que no se encontrara una respuesta a la dosis, es decir, que no se incrementara el riesgo con el aumento de antibióticos prescrito. Estos resultados necesitan replicarse, dado que la literatura ha mostrado ciertas contradicciones en otros estudios empíricos similares. No obstante, el gran tamaño muestral de este estudio y la calidad de los datos de registro lo hacen especialmente relevante. En cualquier caso, los autores con buen criterio señalan otras limitaciones a tener en cuenta: no se consideraron datos sobre tipo de lactancia, dieta del niño o etnia, además de que los tratamiento hospitalarios con antibióticos fueron omitidos. También la clasificación amplio espectro/espectro reducido puede dar lugar a controversias.
Clausen T. D. (2016). Broad-Spectrum Antibiotic Treatment and Subsequent Childhood Type 1 Diabetes: A Nationwide Danish Cohort Study Nutrition Bulletin doi: 10.1371/journal.pone.0161654