La información intoxicada campa a sus anchas en los medios de comunicación. Uno de sus modos, quizá el más peligroso, es el de combinar una gran parte de hechos reales con otros figurados, lo que enmascara muchas veces el engaño, y que actúa como verdadero «troyano» en la arquitectura de una determinada línea argumental.
En este post voy a comentar uno de los últimos ejemplos, referidos a una de las temáticas más tratadas en este blog, como es la contaminación electromagnética y la desesperante negación de la realidad de los hechos por buena parte de la sociedad, pese a las evidencias que existen.
El caso de los bomberos con afecciones neurológicas
La noticia apareció en diferentes webs durante las últimas semanas: Unos bomberos de Sacramento (California) habían reportado daños neurológicos, incluyendo problemas de memoria y confusión, después de que unas antenas de la nueva generación 5G fueran instaladas muy cerca de sus instalaciones.
Hemos de remitirnos a Baxter Dmitry como firmante de la noticia publicada el pasado 12 de julio. La noticia iba complementada con varios enlaces a investigaciones (o más bien a referencias a investigaciones) y un vídeo protagonizado por David Gillote, Presidente del Sindicato de Bomberos del Condado de Los Ángeles, en el que en una intervención ante responsables políticos pide que dejen de colocarse antenas de telefonía en los aledaños de las instalaciones de bomberos, hasta que no se confirme que no son perjudiciales (dadas las evidencias que dicen lo contrario).
Dmitry se remite a su vez a un artículo del medio Sacramento CBS Local. Esta parece la fuente original, fechada el 29 de mayo de 2018.
Diseminación en las redes
El artículo rápidamente se ha diseminado en las redes, sobre todo entre los grupos y webs que están realmente sensibilizados con este tema, y que precisamente son los que más daño sufren cuando hay información sesgada, intoxicada, incompleta.
Incluso EMFfacts se hizo eco de la noticia, pero el pasado 4 de agosto publicaron una rectificación
A widely disseminated story by Baxter Dmitry in YourNewsWire.com on Sacramento firefighters, 5G and neurological damage is not wholly factually based, to the best of my knowledge. The study Dr. Gunnar Heuser and I organized and conducted in 2004 of California firefighters did find neurological damage, but our study was done following 5 years of exposure to 2G cell towers adjacent to the fire station.
Even though 5G is being tested in certain parts of Sacramento, I am personally unaware of any fire stations with 5G towers. SB 649, the 5G infrastructure bill Gov. Brown vetoed on Oct 15, 2017, had an exemption from 5G towers for fire stations for health reasons. The word health was never used in the bill, but the local firefighters’ unions in CA went for this exemption based on their health concerns. There has not been enough time for 5G exposure to test firefighters or anyone exposed.
The article’s source is not reputable. YourNewsWire.com is a Los Angeles-based “clickbait fake news” website known for promoting conspiracy theories. It does not help to have this story circulated with misinformation from this source. Baxter Dmitry writes for the outlet mixing legitimate news with conspiracy theories.
Este texto fue enviado a EMFfacts por Susan Foster, una de las investigadoras que precisamente ha realizado estudios sobre los efectos de este tipo de ondas electromagnéticas en los bomberos en Estados Unidos.
Así, parece que no existen esas torres en las cercanías de los parques de bomberos, habiendo incluso una norma que desde 2017 las prohíbe en esas ubicaciones concretas.
Verdades entre mentiras
Como hemos dicho, este tipo de noticias cuela una o varias mentiras entre verdades. Y la alusión a David Gillote es cierta, aunque su participación en esa comisión fue en 2015.
Guillot, con 25 años de experiencia a sus espaldas, habla claramente de que todo esto le suena a lo que sucedió (y todavía sucede hoy) con los que defienden que no hay datos consistentes que relacionen el tabaco con el cáncer. Guillot parece advertir que está harto de que empleen a los bomberos como una especie de conejillos de indias, instalando antenas de telecomunicaciones junto a sus edificios.
Información veraz
Pese a las dudas que genera esa noticia falsa, lo cierto es que sí que ha habido en los últimos años una preocupación innegable por parte de muchos bomberos acerca de este tema. En la web de ehtrust.org, podemos encontrar amplia información al respecto.
Y ahí están enlazadas diversas investigaciones, aunque la que trata directamente a los bomberos como sujetos de análisis no está publicada en una revista de revisión por pares (al menos es lo que se infiere de esos documentos). Esa investigación fue realizada por Susan Foster y el Dr. Gunnar Heuser, sobre 6 bomberos que habían estado sometidos a la exposición de radiación de antenas de telefonía móvil entre 1999 y 2004. Lo único que tenemos es esta carta enviada a la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC) en 2013, explicando algunos resultados del estudio.
Los 6 bomberos que participaron tenían síntomas claros de electrohipersensibilidad, como dolores de cabeza, fatiga extrema, disrupción del sueño, desorientación, depresión, ansiedad, etc. Esos bomberos habían estado expuestos a intensidades medias de entre 1 y 2 μW/cm2, cuando el estándar de la FCC es de 1000 μW/cm2. En algunos lugares la radiación llegaba hasta los 30 μW/cm2, no obstante, quedaba en varios órdenes de magnitud por debajo de lo que la ley permite en Estados Unidos.
Pero, insistimos, ese estudio parece que no se ha publicado en revistas científicas, y eso es siempre una limitación importante. Sin embargo, el Dr. Hauser es un especialista en el tema, de hecho él mismo se cataloga así en los servicios médicos que ofrece. Hauser tiene publicaciones en revistas «serias», como lo es la publicada en Reviews of Environmental Health en 2017. En ella, los autores encuentran que los 10 participantes de su estudio (que son electrohipersensibles) tienen resultados anormales en las resonancias magnéticas realizadas en su cerebro.
Conclusión
Las noticias falsas contaminan cualquier ámbito, y propician una desconfianza total hacia cualquier tipo de información posterior, sea veraz o no, por lo que cumplen el objetivo de desorientar y crear confusión.
Para aquellos que están luchando porque la sociedad abra los ojos ante el problema de la contaminación electromagnética, este tipo de intoxicaciones les hace daño, y lo que hay que intentar es ser lo más riguroso posible ante la evidencia disponible. No es fácil, porque a todos nos pueden engañar, y a veces lo consiguen.
Tras el breve análisis realizado sobre el caso de los bomberos, lo único que podemos decir es lo siguiente:
(1) Es cierto que hay preocupación entre el colectivo de bomberos sobre los efectos de las antenas de telefonía que se colocan en las cercanías de sus instalaciones. Algunos capitanes de bomberos han mostrado públicamente su oposición a las torres de telefonía. Ver cómo profesionales cualificados (mental y físicamente) con alto grado de experiencia defienden el principio de precaución es algo a tener muy en cuenta.
(2) Es cierto que hay bomberos que han reportado síntomas de electrohipersensibilidad, pero hasta ahora no hay ningún estudio publicado en revistas de revisión por pares al respecto.
(3) Los bomberos tiene una mayor incidencia de ciertos tipos de cáncer. Esto ha sido ligado a la exposición a radiofrecuencia por Sam Milham, pero no deja de ser una hipótesis que no se ha confirmado hasta la fecha.
De momento, esto es lo que, de facto, tenemos.